Centro de estadísticas del Valencia Basket-Real Madrid
Se esperaba un partidazo y vaya si lo fue. La diferencia de calidad y banquillo habituales entre los dos equipos en los últimos años se ha reducido a la mínima expresión en el presente curso. Entre que Scariolo sigue con su plan renove de sistemas y adaptación, y que a Pedro Martínez le han dado un arsenal de opciones para potenciar su juego vertical, de energía constante y de tiros rápidos, el Valencia salió mentalizado para volver a demostrar al Madrid de lo que es capaz. Ya le ganó, de hecho, en la final de la Supercopa acb el 28 de septiembre.
Pero los blancos son duros de roer. Tienen al mayor intimidador de Europa y, entre otras muchas virtudes, han sumado a un Lyles que empieza a mostrar su nivel NBA. Incluso Alex Len, el último en llegar, parece haber caído de pie. De ahí que los taronja tuvieran que esperar a los 30 últimos segundos del primer cuarto, con un reverso de Kameron Taylor, para liderar el marcador (22-21).
El Valencia incrementó a partir de ahí su intensidad defensiva, incomodando cada vez más al enemigo, y siguió con su acierto perimetral (10/24). Incluso Reuvers se permitió el lujo de posterizar a Tavares, que no tuvo su mejor día. Lo nunca visto.
Cada vez que el Madrid apretaba, y momentáneamente le salió bien (29-30), los locales lo hacían aún más. Ni la zona de Scariolo frenaba a los tiradores: si no era Reuvers era Pradilla, y si no, Moore o, por supuesto, Darius Thompson. Los únicos no atinados, especialistas como Montero y Taylor. Errores compensados por el pobre 3/12 de los merengues, lo que permitió que al descanso se llegara con ventaja che por 45-38 y un cabreo monumental de Scariolo por un error de la mesa al detener antes de tiempo el reloj.
Ni el paso por vestuarios tranquilizó al exseleccionador español, al que los árbitros le permitieron revisar in situ, como si fuera un operario técnico más, durante varios minutos el porqué del fallo, lo que retrasó la reanudación del partido. En cuanto el balón pasó de nuevo a ser protagonista, volvió a asomar el infernal ritmo que imprime Martínez a su equipo. Un sobreesfuerzo posible por su infinita rotación y que dejó al Madrid anotar solo cuatro canastas en juego en el tercer cuarto, que acabó con 67-60.
Los casi 15.000 espectadores presentes en el Roig Arena estallaron de júbilo con el arranque de los suyos en esos últimos 10 minutos. Un 2+1 de Kameron Taylor ante Hezonja les puso con un interesante 72-60. Casi tres minutos tardaron los madrileños en anotar. Estaban contra las cuerdas. Y eso que se les cerró el aro a los taronja con sus tiros exteriores. Pero más aún lo tenían ellos. No sería por no intentarlo, porque hasta Scariolo puso un quinteto de bajitos en la recta final. Ni por esas. Venció con merecimiento el Valencia Basket, donde todos, incluyendo al debutante Sima, aportaron para romper así una racha de cuatro derrotas seguidas contra el Madrid en la Euroliga.

Los MVP
Moore, Reuvers y Darius Thompson se combinaron para sumar 44 de los 89 puntos del Valencia. En el Real Madrid, el más destacado fue Lyles, con 23 puntos, nueve rebotes y 24 de valoración, con un buen Maledon, que sumó 22 créditos tras aportar 14 puntos, cinco asistencias y tres rebotes
