Se disputaba el último cuarto de un intenso e igualado encuentro en el que el Barça necesitaba la victoria para seguir dependiendo de sí mismo de cara a estar en la Copa del Rey. Abrines, capitán culé, a seis minutos del final, sufrió un fuerte golpe en la tibia de su pierna izquierda y se tiró al suelo. Ya no pudo continuar y tuvo que ser acompañado a vestuarios sin poder apoyarse en el suelo.
Tras el choque fue trasladado a un centro hospitalario donde ha recibido buenas noticias, como ha anunciado el club azulgrana en un comunicado. "Álex Abrines ha recibido un fuerte golpe en la tibia de la pierna izquierda en el último cuarto del partido. Las pruebas médicas realizadas en un centro médico de Las Palmas de Gran Canaria han descartado que se produzca una fractura".
Habrá que esperar a ver su evolución, pero se ha salvado el alero azulgrana de una grave lesión.