Primera edición de los dos partidos programados para esta noche en los Juegos de París de la NBA. San Antonio Spurs-Indiana Pacers en el Accor Arena de París, una oportunidad para calibrar la popularidad de un tal Victor Wembanyama, la esperada estrella de la acción de esta semana en París, pero también, y sobre todo, para presenciar un buen partido de baloncesto.
La joven estrella no tuvo un buen comienzo, aunque el público calentara su puesta en escena. En cambio, fue Tyrese Haliburton quien controló el tempo al principio del partido, ya fuera tirando o pasando. Los Pacers fueron los primeros en tomar el control, antes del primer arrebato de los Spurs, liderados por Wembanyama, claro.
Una racha de 7-0 restableció el equilibrio de fuerzas, pero fue Devin Vassell el hombre del partido para los Spurs en el primer cuarto. Obi Toppin salió del banquillo de los Pacers para anotar nada menos que 11 puntos seguidos en el primer cuarto. Pero los Spurs ganaron 30-29 tras los primeros 12 minutos en un partido claramente ofensivo. Sin embargo, hubo una repentina bajada de tensión al comienzo del segundo cuarto, con una mala ejecución de los texanos, antes de que un gran punto culminante de Wemby volviera a encender la máquina y al público.
Facilitador para los Spurs, el francés marcó el ritmo y su equipo encontró cierta fluidez. Sin embargo, ninguno de los dos equipos se esforzaba en defensa, y Tyrese Haliburton aprovechó la situación para exhibir su juego fluido y mantener a los Pacers en el partido. No obstante, en este juego de ataque, San Antonio se fue con ventaja al descanso (57-60), con Wembanyama anotando ya 15 puntos.
Indiana, sin embargo, parecía volver con otras intenciones, pero no lograron ponerlas en práctica. Harrison Barnes tomó cartas en el asunto para volver a poner a los Spurs por delante, y Wemby logró por primera vez dobles figuras. Los Pacers perdieron por completo su juego colectivo, perdieron cada vez más el balón, y la diferencia se amplió de repente. Tras un robo de Vassell y un viaje a la línea de tiros libres, San Antonio ganaba por 20 puntos a falta de 3 minutos para el final del tercer cuarto.
Indiana había explotado totalmente en este tercer parcial, ¡en el que los Spurs habían anotado nada menos que 45 puntos! Con 25 de ventaja para San Antonio, el suspense parecía totalmente extinguido. Pero eso no fue suficiente para impedir que Wembanyama montara un espectáculo con el que romper cualquier atisbo de racha de los Pacers.
La victoria de San Antonio ya no estaba en duda, con los secundarios Barnes y Vassell haciendo un trabajo impecable. Wemby pudo marcharse con una sensación de logro, 30 puntos y 11 rebotes en el zurrón, para un buen tiempo de la basura que claramente no se esperaba. Pero así fue, los Pacers nunca salieron del vestuario, y eso les costó el partido.
Al final, los Spurs ganaron 110-140, no una victoria porque sí: una victoria para demostrar que, tras un periodo algo menos exitoso, siguen en la carrera de Play-in, y que a pesar del jet lag y de lo que se le exigió, Victor Wembanyama supo estar a la altura de las expectativas. Lo sabremos el sábado, y esperemos que esta vez los Pacers consigan jugar un partido de verdad durante 48 minutos.