Jobe Bellingham no está viviendo la experiencia que imaginaba en Westfalia. El Borussia Dortmund apostó fuerte por él —pagó 30,5 millones de euros al Sunderland, cifra récord en la historia del club— con la esperanza de repetir el éxito que tuvo su hermano mayor, Jude. Pero apenas unos meses después de su llegada, el joven mediocampista inglés parece más cerca de salir que de consolidarse.
A sus 20 años, Jobe esperaba dar el salto definitivo a la élite tras brillar en el ascenso del Sunderland a la Premier League. Sin embargo, su protagonismo en Alemania ha sido mínimo: solo ha disputado 187 minutos en Bundesliga en seis partidos y no ha jugado ningún encuentro completo. Niko Kovač, su entrenador, apenas lo ha utilizado, y eso ha encendido las alarmas en su entorno.
Tensión fuera del campo
De acuerdo con el diario Bild, la complicada situación familiar del jugador también está influyendo en su rendimiento. El medio alemán asegura que la relación entre sus padres, Mark y Denise Bellingham, atraviesa un momento difícil, algo que estaría afectando la estabilidad emocional de Jobe. Ambos fueron vistos en zonas separadas del palco VIP durante un reciente partido de Champions, reflejo de un ambiente tenso que preocupa al club.
Además, el vínculo entre Mark Bellingham y el cuerpo técnico del Dortmund tampoco es el mejor. El padre del jugador habría tenido un encontronazo con la directiva a comienzos de temporada, motivo por el cual se le habría restringido el acceso al vestuario.
¿Un adiós prematuro?
La combinación de factores —poca confianza del entrenador, tensiones familiares y falta de adaptación— ha llevado a Jobe a plantearse un cambio de rumbo. Según el periodista Sacha Tavolieri, el mediocampista ya está valorando la posibilidad de salir del Dortmund si su situación no mejora en los próximos meses.
Varios clubes de la Premier League habrían tomado nota y siguen de cerca su evolución. El futuro del pequeño de los Bellingham podría resolverse en el próximo mercado de fichajes, aunque por ahora, su historia en Dortmund está lejos de ser la que todos esperaban.