Es el primer año del extremo en el PSG y también era su curso debut en una competición como la Champions League. Además, el conjunto de la capital gala se enfrentaba al reto de suplir a un jugador como Killyan Mbappé.
Dembelé, Gonçalo Ramos o Kolo Muani y Barcolá eran los teóricos titulares a principio de temporada. La llegada en invierno de Kvaratskhelia desplazó a uno de esos cuatro y la salida de Kolo Muani abrió un espacio más, pero Doué con su desparpajo se convirtió en un fijo para Luis Enrique desplazando a un jugador como Barcolá al banquillo.
La llamada de Deschamps con Francia y los escenarios grandes parecieron motivar a Doué. En un partido tan exigente como la final de la Champions metió dos goles y regaló otro convirtiendose en el MVP con tan solo 19 años.