En una jornada irregular se puede ir la Champions de las manos. Que lo diga el Liverpool, un equipo que se armó para volver a conquistar la Liga de Campeones y que se quedó fuera ante el PSG de Luis Enrique en Anfield, bajo la mirada de su público. También pueden comentar dicha situación el Milán o la Juventus, eliminados en las primeras de cambio de la competición continental más importante de Europa.
El Barça, en cambio, tiene la capacidad de recibir tres goles de Guirassy, un delantero top, potente, fuerte y efectivo pero salir con vida de Signal Iduna Park, uno de los mejores campos para ver fútbol europeo. La mítica del templo del Dortmund ha impulsado a los suyos a buscar una remontada que se puso de cara con un temprano gol de Giurassy vía penalti a los 11 minutos del encuentro . El ariete puso los dos siguientes en la segunda parte y reflejó la constante distracción de la defensa blaugrana.
La función de Guirassy no ha sido suficiente. El Barça se ha clasificado para una semifinal de la Champions seis años después y el ariete del Dortmund ha terminado la eliminatoria con cara larga pese a marcar un triplete.
La última oportunidad, sinónimo de tragedia, en la que el cuadro culé estuvo entre los cuatro mejores de Europa fue aquella noche en Anfield en donde el córner de una joven promesa Trent Alexander Arnold y una distracción de la defensa blaugrana clasificó al Liverpool para la final en la 2018-2019.

El Barça espera al Inter o al Bayern tras un mal día en Dortmund. El partido sirve para aprender, para enfatizar la concentración y para corregir. Los culés, desconcidos, no realizaron ni un tiro a puerta en 45 minutos. Se notó la ausencia de Pedri en la zona medular y la baja de Iñigo Martínez, uno de los mejores de la última línea culé en la presente temporada.
El próximo reto será sacar más renta en LaLiga mientras que vuelve la Champions. En la siguiente jornada, los catalanes recibirán al Celta de Claudio Giraldéz en Montjüic.