No todo, al parecer, eran caras felices en el Real Madrid después de la goleada ante el Kairat en la segunda jornada de la Champions. Ni Vinícius, nuevamente sustituido, ni Valverde, suplente esta vez y que calentó de una manera extraña cuando se lo pidieron, reflejaron en su semblante y actitud estar contentos. Sin embargo, Xabi Alonso ha restado importancia.
Con el brasileño, que sale a cabreo por cambio cuando es titular, el donostiarra ha sido contundente. "Quizás otro día, pero hoy no fue un rebote", ha asegurado el técnico.
Vini, cuando fue al banquillo, se tapó la boca con la mano y habló. "Lo de Vini no ha sido una queja. Ha habido un comentario que hemos entendido", ha insistido en la rueda de prensa posterior.
El Parajito, suplente
En cuanto a Valverde, extrañó mucho que después de entrenar como lateral derecho, cuando antes había dicho que no le gustaba jugar ahí, no jugara ni un minuto. Y según algunas imágenes, su actitud cuando le pidieron calentar en la segunda mitad, con las manos atrás, no le dejó en buen lugar.
"Es una decisión que estaba tomada. Fede siempre está dispuesto, siempre está con buena predisposición. Si el partido lo hubiera requerido, hubiera jugado. Como Carreras. Pero hay que dosificar. Hay que saber manejar", ha explicado Xabi Alonso. Sin embargo, raro es que comparezca en la rueda de prensa oficial de la UEFA alguien que no va a jugar el día después. "No tengo ni idea", ha dicho el entrenador cuando se le ha preguntado si había ocurrido algo extraño con el uruguayo.
Está claro que la gestión del vestuario es una asignatura clave en el examen diario al que está sometido el preparador madridista.