Porque necesitaba que Italia venciera a Eslovaquia (0-1) para que la anfitriona se quedara con el rosco en su casillero, como Rumanía, y ya ninguna pueda alcanzar ni a españoles ni a italianos, que han ganado sus respectivos encuentros.
A pesar de la agonía de las victorias de los de Santi Denia, al final se ha conseguido el objetivo antes de afrontar la última jornada, donde se decidirá el liderato y, en teoría, un mejor cruce.

España ganó en su debut a los eslovacos por 2-3 después de ir ganando 0-2 y tener que esperar al tiempo añadido para que César Tárrega marcase la diana del triunfo. Ante Rumanía se comenzó perdiendo con un gol de Munteanu a los tres minutos, y también hubo que esperar a la recta final para que Jauregizar y Roberto Fernández firmasen la remontada.
Un pleno de victorias que les ha llevado a los cruces en la segunda fase. Pero antes, el martes a las 21 horas, la cita con Italia. Un empate le valdría a España para pasar como primera, pues aunque tienen dos goles en el average general, ha marcado más que su próximo rival.
