El juez único de Competición ha confirmado esta semana que el Real Madrid-Osasuna, que abre LaLiga el próximo 19 de agosto, no va a ser aplazado.
Esta circunstancia ha provocado un tremendo enfado en el club blanco, no tanto por la decisión de la justicia sino por la postura inflexible de LaLiga, que considera que no ha tenido sensibilidad con el calendario del Madrid.
Los de Xabi Alonso terminaron la pasada temporada el 9 de julio, cuando cayeron 4-0 ante el Paris Saint-Germain en las semifinales del Mundial de Clubes y despidieron un curso para olvidar con un severo correctivo.
Vuelta al trabajo
El Madrid vuelve al trabajo este lunes 4 de agosto, cumpliendo con las recomendaciones de FIFPro, de que los equipos necesitan al menos tres semanas de descanso.
Sin embargo, la pretemporada dista mucho de ser la que había imaginado Xabi Alonso. El de Tolosa sólo disputará un amistoso, el próximo 12 de agosto ante el Tirol antes de empezar el campeonato una semana después frente a Osasuna.
En el club contaba con empezar LaLiga en la segunda jornada frente al Oviedo en el Carlos Tartiere y disponer de ese modo, de más tiempo para conjuntar a la plantilla.