El Madrid post-Clásico está a años luz del Madrid que le ganó al FC Barcelona en el Santiago Bernabéu. Aquel equipo dinámico y dominante no tiene nada que ver con el que se vio en Girona. La plantilla estuvo con la pólvora mojada en Montilivi. Salvo Mbappé, que como siempre responde y se pone el equipo al hombro, los blancos han estado lejos de sus expectativas y para colmo de mal le han entregado al Barcelona el liderato en bandeja de plata.
Noviembre ha sido un mes negro para el Madrid. Las cuentas son claras: los de Xabi han disputado seis partidos. Han ganado dos -contra Valencia y Olympiacos-, han empatado tres- Rayo, Elche y Girona- y han perdido uno -Liverpool-, siendo brutalmente rescatados por Courtois en Anfield.

Cómo no manejar una renta
El Madrid, además, ha perdido el liderato. Después del Clásico, los blancos lograron una renta de cinco puntos sobre el Barcelona. Ahora los de Flick tienen un punto de ventaja. Se ha dado una lección sobre cómo no se debe manejar una renta. La presión vuelve a quedar en el cuerpo técnico del Madrid.
La siguiente prueba será el Athletic el 03 de diciembre en San Mamés. Un partido difícil y muy físico contra un rival que ha sido irregular y que necesita sumar en casa.
