El Bigotón, como se le conocía por su irremplazable mostacho, nos ha dejado en el país andino, donde residía desde hacía más de dos décadas, como ha anunciado el Club Bolívar, en el que también ejerció como director técnico.
Fue allí en tierras bolivianas donde se convirtió en leyenda al lograr la clasificación para el Mundial de 1994, la primera y única hasta el momento de esa selección. Después dirigió a la selección chilena, al Yokohama japonés y al Chivas mexicano antes de vover a Bolivia para dirigir nuevamente al combinado nacional, al Bolívar, al Oriente Petrolero, al Sport Boys y al Atlético Palmaflor.
En España también había hecho carrera como técnico profesional habiendo dirigido al Nàstic de Tarragona, Espanyol, Valladolid, Sevilla y Tenerife. Con estos cuatro últimos sumó un total de 227 partidos en LaLiga.
Desde Flashscore nos únimos al pésame por su fallecimiento. Descanse en paz.