Sólo tres días después de que concluyan sus compromisos en LaLiga, los blancos viajarán al Metropolitano para enfrentarse al equipo de Diego Simeone, por lo que tener que jugar el domingo con sus titulares casi al completo no será necesariamente atractivo para ninguno de los dos.
El Barça no conoce la derrota en lo que va de año y ha ganado sus seis últimos partidos, cuatro de ellos con la portería a cero.
Por el contrario, su rival sólo ha marcado siete goles a domicilio en la campaña 2024/25 (el registro más bajo de la división) y los rojillos sólo han ganado uno de sus 12 partidos a domicilio esta temporada.
Su única victoria en Barcelona desde 2011 se produjo en 2020, mientras que el único empate sin goles en el mismo periodo de tiempo se produjo en El Sadar de Osasuna, lo que significa que los catalanes siempre han marcado al menos un gol en casa contra este rival en los últimos 14 años.
Sin embargo, el entrenador visitante, Vicente Moreno, ha evitado la derrota en sus dos últimos partidos contra el Barça (V1 E1) y querrá continuar esa racha.
Para lograrlo de nuevo, tendrá que impedir que el jugador más influyente del Barcelona esta temporada, Raphinha, haga estragos en el partido del sábado por la noche.
Antes de la presente campaña, intervino en 14 goles (siete dianas y siete asistencias) en LaLiga en su primera temporada y 15 (6G, 9A) en la segunda, pero sólo fue titular en 42 partidos de 76 posibles. Está claro que Xavi no lo consideraba tan importante, pero desde que la antigua leyenda del Barça fue sustituida, el brasileño ha estado en una forma sensacional a las órdenes de Hansi Flick, marcando 25 goles y dando 16 asistencias más en los 39 partidos que ha disputado en todas las competiciones.
La confianza depositada en él por el alemán se ha visto recompensada, y Raphinha se ha mostrado tan peligroso como número 10 como en la banda esta temporada.
Aunque Robert Lewandowski ha marcado más goles (33), ése es su pan de cada día, y la contribución global del internacional polaco palidece en comparación con la de su compañero de equipo.
A pesar de que su porcentaje de acierto en el pase (78%) tampoco es de los mejores, el siguiente gráfico muestra cómo, en determinados partidos, su participación está fuera de toda duda.

Como competidor polivalente, es difícil argumentar en contra de que Raphinha sea el hombre de referencia.
Sus 100 disparos en todas las competiciones son al menos 12 más que nadie, siendo Lewandowski (88), Lamine Yamal (84) y Dani Olmo (33) los que más se le acercan en esa métrica concreta.
Raphinha es el segundo jugador del equipo que más pases de tiralíneas ha dado, y el primero en pases hacia atrás.
De los jugadores de ataque del equipo, sólo Lamine y Pedri tienen un porcentaje de acierto en el duelo ligeramente mejor que su 53,9 también.
Se ha esforzado especialmente en sus tareas defensivas, como demuestran sus 45 entradas desde una posición adelantada, y que sólo superan Jules Koundé (62) -defensa-, Marc Casadó (80) -centrocampista defensivo- y Pedri (81).
El mapa de calor que figura a continuación muestra sin duda la diligencia con la que patrulla su banda y otros lugares, y quizá por eso Hansi Flick ha confiado como titular en Raphinha más que en ningún otro jugador en la 24/25.

En cuanto a minutos jugados a lo largo de la temporada, sólo los 3.275 minutos de Koundé han superado los 3.202 del extremo.
39 partidos jugados con el club en lo que va de temporada es bastante, con al menos 12 partidos más de liga por jugar, uno en la Copa del Rey (tal vez dos), y uno en la Liga de Campeones, pero hasta seis si el Barça llega hasta la final.
En comparación, en 2023/24, Raphinha jugó 37 veces en total, fueron 50 apariciones durante 2022/23 y 36 con el Leeds United en 2021/22.
Se puede, por tanto, deducir una curva ascendente en sus apariciones argumentada por su importancia para los blaugranas.
No olvidemos la responsabilidad de capitán que también le otorgó Hansi Flick en ausencia de Marc-Andre ter Stegen, Frenkie de Jong y Ronald Araújo por lesión.
A Raphinha le ha sentado muy bien llevar la voz cantante, como atestiguan los asiduos a LaLiga, que han sustituido la fanfarronería y el jogo bonito por la seriedad en su juego.
"Es un orgullo llevar el brazalete, no sólo en el campo, sino también fuera de él y en el vestuario. Escuchar a todos, ayudar a todos en todo lo que pueda. Siempre estoy listo para mis compañeros y es algo feliz y emotivo ser capitán", dijo.
Si bien es cierto que el Barcelona cuenta con muchos líderes experimentados en el vestuario, la habilidad de Raphinha sigue marcando la diferencia entre sus compañeros.
Su velocidad, su rapidez mental, su sentido del control en pleno vuelo y su fluidez de movimientos se combinan para convertirle en alguien realmente peligroso, como ya han comprobado muchos rivales esta temporada.
Contra Osasuna, el brasileño, como cualquier otro, tendrá un punto que demostrar, porque la derrota a principios de esta temporada sigue siendo el único partido de liga en el que el Barça ha encajado cuatro goles, y el único encuentro de la 24/25 en el que Raphinha no fue titular.
