Pablo Torre (22) es una de las grandes apuestas del Mallorca. El canterano culé dejó al FC Barcelona en busca de más minutos y por cosas de la vida tendrá su primer partido con el equipo balear frente al club que lo ha visto nacer como futbolista y con el que ha levantado sus primeros títulos (Dos Ligas, una Copa del Rey y dos Supercopas de España).
El overbooking de la zona medular (con nombres como Dani Olmo, Pedri, Fermín o Ferran por delante) han ocasionado la salida de Torre. El jugador, en sí, ha tenido poco protagonismo: 14 partidos, cuatro goles y tres asistencias en el pasado curso. Su estadística, en materia de goles y asistencia, es efectiva. Por ello ha recalado en el Mallorca, un club con un sistema claro y que necesita de un conductor de balón de sus características.