Perder un clásico en la última jugada y con un autogol es de los peores golpes que existen en el fútbol. Son los momentos más complicados y difíciles de digerir para los futbolistas. Y así, en ese contexto adverso, la selección peruana inició este miniproceso de Manuel Barreto con una derrota de 2-1 en Santiago ante Chile, con una propuesta que se fue cayendo con el correr de los minutos.
"Cuando te ganan el partido en la última jugada duele, pero mi dolor es sobre todo porque no lo merecieron. No cambia el orgullo que siento por cómo se han entregado", declaró Barreto, actual jefe de la Unidad Técnica de Menores de la Federación Peruana de Fútbol y elegido por Jean Ferrari como técnico interino.
Cuando parecía que la Bicolor rescataba un empate ante los chilenos, un autogol de Matías Lazo en el minuto 93 sentenció el resultado a favor de los locales que también aprovecharon este amistoso para darle minutos a nuevos jugadores pensando en el próximo proceso eliminatorio.
Más allá de la derrota, este tipo de partidos se miran más allá del resultado, y en eso se destaca la actitud de los llamados nuevos rostros de esta convocatoria de Manuel Barreto.
Un planteamiento más parecido al 4-4-2, con Maxloren Castro -joven debutante de 17 años- moviéndose por ambos lados del ataque y con Joao Grimaldo como el más peligroso, siempre por la banda derecha.
El primer tiempo quizás sea lo que más se quiera ver de la Bicolor, un cuadro que busca siempre atacar por los extremos, con Erick Noriega adelantado en el mediocampo, con Jesús Castillo mirando bien todo el campo y Jairo Concha más cerca a los delanteros, pero cuando Chile recuperó el balón, nos costó el retroceso. Pese a todo, la Bicolor abrió el marcador con un golazo de César Inga, una arremetida por izquierda para definir con un remate de derecha. Luego, los sureños se hicieron dueños del partido.
"Es un grupo nuevo, yo también estoy entrando, y el grupo tiene hambre de gloria de querer superarnos, trabajando para los partidos que vienen", declaró el futbolista de Universitario de Deportes.
Y ahí está la tarea a resolver en la selección peruana, que se arrinconó demasiado en su campo ante el dominio rival y por eso sufrió más de la cuenta en el segundo tiempo, incluso tras los cambios realizados por el entrenador.
Entró Felipe Chávez cuando faltaban menos de 15 minutos, pero ni el momento del partido ni la cantidad de tiempo lo ayudaron para participar en alguna jugada de ataque. Eso sí, siempre levantó los brazos pidiendo el balón, aunque se notó la falta de entendimiento con sus compañeros en cada movimiento.
Parecía un 1-1 que igual dejaba muchas dudas, pero en la última jugada Matías Lazo tuvo la mala fortuna de desviar un balón y marcar la ventaja para Chile.
Los debutantes de la selección peruana
Pese a la derrota, Manuel Barreto apostó por jugadores jóvenes y varios de ellos debutaron pensando en el Mundial de 2030.
Diego Enríquez, arquero de 23 años de Sporting Cristal, le ganó la pulseada a los otros dos porteros y ofreció una buena actuación bajo los tres palos. Poco y nada pudo hacer en los goles de Chile.
Matías Lazo, defensor de 22 años de Melgar, actuó como lateral derecho pero sufrió demasiado los ataques rivales. Lamentablemente protagonizó el autogol que le dio la victoria al cuadro sureño.
Maxloren Castro, de 17 años de Cristal, mostró cosas interesantes en su debut. Barreto lo hizo jugar de extremo izquierdo y posteriormente de mediapunta, y mostró mucha sensibilidad y desequilibrio para poner en jaque a Chile en las transiciones ofensivas.
Felipe Chávez, el volante de 18 años que pertenece al Bayern Múnich, ingresó a los 78' y no pudo desplegar su fútbol. Entró en medio del caos y las arremetidas sureñas, y apenas tocó el balón. Sus compañeros no supieron encontrarlo y a él le faltó una pizca de rebeldía para mostrar su talento.