A cinco puntos del líder Arsenal, el City considera que la diferencia es lo suficientemente corta como para justificar un impulso a mitad de temporada. Por eso, se abrirán conversaciones para decidir si un fichaje clave podría dar un giro a su campaña.
El gran arranque del Arsenal no ha mermado el optimismo del City. Los Gunners están firmando una temporada excelente, pero el hecho de que el City siga cerca ha animado a su equipo de captación a explorar opciones que puedan reforzar la plantilla de cara a la segunda mitad de la temporada.
En líneas generales, el City está satisfecho con su situación actual, aunque según fuentes cercanas al club, se está valorando la incorporación de un atacante. También se contempla reforzar el centro del campo.
Un nombre que está ganando fuerza es el de Bournemouth, Antoine Semenyo.
Su estilo ofensivo y su capacidad de trabajo encajan con el deseo del club de aportar más dinamismo al ataque, especialmente en una temporada en la que el equipo de Guardiola ha dependido mucho de Erling Haaland para marcar goles.

El City también está evaluando soluciones para el centro del campo. Existen ciertas preocupaciones por los minutos de Rodri, ya que sigue arrastrando problemas físicos.
Dentro de la directiva del Etihad gusta mucho Crystal Palace y su jugador Adam Wharton, mientras que Nottingham Forest y su futbolista Elliot Anderson, así como Ederson del Atalanta —ambos también seguidos por el Manchester United— siguen en la lista de candidatos del City.
Cualquier fichaje en el centro del campo buscaría reducir la presión sobre la presencia de Rodri y, al mismo tiempo, preparar la plantilla para evolucionar en las próximas temporadas.
El City es consciente de que también tiene que resolver la situación de Bernardo Silva. El centrocampista portugués termina contrato al final de la temporada y se espera una decisión definitiva sobre su futuro a comienzos del nuevo año. Sin embargo, fuentes cercanas apuntan a que ha mostrado disposición a marcharse, con clubes extranjeros preparando ofertas para enero.
El club sabe que una salida obligaría a una importante reestructuración en su esquema de juego.
Con el título aún al alcance, el mercado de enero del Man City —que se preveía tranquilo— apunta a convertirse en un momento clave de la temporada.

