Sampaoli ya había dirigido al Santos en 2019, donde dejó una gran impresión con una campaña de 34 victorias, 15 empates y 15 derrotas, que terminó con el subcampeonato del Brasileirão. A pesar de esa experiencia positiva y de la posibilidad de dirigir a Neymar —recientemente reincorporado al club tras su paso por Arabia Saudita—, el técnico de Casilda consideró que no era el momento adecuado para regresar.
¿Por qué rechazó la propuesta?
Según trascendió, la decisión de Sampaoli estuvo motivada por factores deportivos, institucionales y económicos. En primer lugar, evaluó junto a su cuerpo técnico que el contexto actual del plantel y la falta de tiempo para entrenar antes de una serie clave de partidos no eran condiciones favorables para asumir el reto.
A esto se sumaron tensiones internas en el club: una de las reuniones preliminares no contó con la participación de Pedro Martins, consejero delegado del club, quien había declarado que no estaba dispuesto a “entregar las llaves del club”, en referencia al nivel de autonomía que suele pedir el cuerpo técnico liderado por Sampaoli.
Además, desde la dirigencia hubo reparos por el alto costo operativo que implicaba su contratación. Según Globo Esporte, el “paquete Sampaoli” incluía demandas exigentes en cuanto a refuerzos y un perfil que algunos consideran “difícil de manejar en el día a día”.
El nuevo apuntado: Eduardo Domínguez
Tras las negativas de Tite, Dorival Júnior y ahora la de Sampaoli, el club brasileño evalúa nuevas alternativas. Una de ellas es Eduardo Domínguez, actual entrenador de Estudiantes, quien atraviesa un buen momento tanto en el Torneo Apertura 2025 como en la Copa Libertadores.
El interés por Domínguez también se relaciona con su vínculo previo con dos futbolistas del plantel paulista: Benjamín Rollheiser y Leonardo Godoy, ambos dirigidos por él durante su etapa en Estudiantes. Este nexo podría facilitar su llegada en caso de que Santos decida avanzar con una propuesta formal.
Sin embargo, la operación no parece sencilla. Domínguez tiene contrato vigente con el Pincha hasta diciembre de 2025, y por ahora no hay gestiones oficiales. Desde su entorno indican que el técnico está enfocado en los objetivos inmediatos de Estudiantes, aunque no descartan que ante una oferta concreta y un contexto institucional favorable, el interés del Santos pueda evolucionar. ¿Qué ocurrirá?