Consciente de que tenía que ganar en casa al Monza, último en la clasificación, la Roma atacó desde el principio a pesar de la importante rotación. Baldanzi y Soulé por detrás de Shomurodov se buscaban a menudo para crear juego en la zona de tres cuartos. Y a los cinco minutos, una incursión por la izquierda del argentino encontró a Pisilli en el centro del área, que chutó de la peor manera posible, aunque sin encontrar portería. Fue el inspirado Saelemaekers, sin embargo, quien abrió el marcador con un delicioso zurdazo que, en el minuto 10, concretó la superioridad giallorossi.
Convencido de sus propios medios y ya relajado tras la ventaja, la Roma se lanzó inmediatamente en busca del segundo. Y tras algunas iniciativas importantes de un dinámico Baldanzi, fue su alter-ego Soulé quien cambió de posición por la derecha para generar el doblete. Un par de fintas y luego un centro desde la línea de gol cuyo destinatario fue Shomurodov, que saltó con perfecta sincronización y dio al balón la fuerza justa para marcar el 2-0. El uzbeko, que se había quedado culpablemente solo, marcó así después de seis meses, dejando prácticamente sentenciado el partido.
Una tímida reacción de los Brianzoli al final de la primera parte se manifestó en un disparo de Ganvoula que Svilar desvió tirándose al suelo. Un suspiro mínimo, pero que podría haber dado la vuelta a la tortilla para una Roma que había dominado la primera parte. La segunda parte, sin embargo, comenzó con una perfecta gestión del regate por parte de los Capitolini, que en torno al minuto 60 estuvieron a punto de marcar el tercer gol por mediación de Baldanzi, cuyo disparo detuvo un atento Turati.
Pero fue otra arremetida la que propició el tercer gol. Y fue inesperada. Porque en el minuto 73, el veterano Hummels salió con fuerza y vigor desde la línea de fondo y habilitó a Cristante por la izquierda para Angeliño, quien, nada más entrar en el área, lanzó una diagonal rasa que acabó dentro de la portería. Fue el gol que bajó el telón de un partido que no terminó de arrancar. Y le siguió el tanto de Cristante justo antes del final, con la testa tras un saque de esquina desde la izquierda de Dybala.
La victoria de la Roma confirmó el excelente momento del club giallorossi, que ahora suma 40 puntos y está a sólo dos del sexto, la Fiorentina. La lucha por la Europa League será reñida, pero en el rush final Ranieri y sus hombres serán serios y amenazadores candidatos.
Jugador Flashscore del partido: Shomurodov (Roma).