Además, un juez ha decidido el encarcelamiento del presidente del Eyüpspor, club de Primera división turca, en el contexto de estas investigaciones.
11 árbitros bajo custodia policial desde el viernes fueron puestos en libertad bajo control judicial el lunes por la justicia turca, que investiga en especial indicios de amaño de partidos.
Los seis árbitros enviados a prisión ejercían como árbitros asistentes en Tercera y Cuarta división, según la página web de la Federación Turca de Fútbol (TFF).
En paralelo, la TFF anunció haber convocado ante su consejo de disciplina a 1.024 futbolistas del país, acusados de haber apostado en partidos pese a la prohibición que tienen.
Los campeonatos de Tercera y Cuarta división del país, en los que juegan más de 900 de los jugadores incriminados, han sido suspendidos durante dos semanas, anunció la TFF, que ha previsto celebrar una reunión extraordinaria el martes.
27 de los jugadores bajo sospecha por haber hecho apuestas juegan en Primera división, entre ellos el internacional turco Eren Elmali, defensa del Galatasaray.
El 27 de octubre, una investigación interna de la TFF sobre 571 árbitros de ligas profesionales reveló que 152 de entre ellos, de los cuales 22 ejercen en Primera división, "apostaban de forma activa" en partidos.
Poco después, la TFF suspendió a 149 árbitros con duraciones de entre ocho y 12 meses, prometiendo "limpiar" el fútbol turco.
En un comunicado conjunto emitido el miércoles, estos árbitros denunciaron "acusaciones odiosas", afirmando que ninguno de ellos ha apostado jamás en un partido que haya dirigido.
Una parte de ellos también afirma que sus apuestas se remontan a una época en la que eran árbitros amateur.
En 2011, un escándalo de partidos amañados sin precedentes en Turquía sacudió los campeonatos de Primera y Segunda división, que tuvo como consecuencia el descenso del gran club estambulí Fenerbahçe.
