No era un secreto que el papa Francisco era un fanático del fútbol, más específicamente de San Lorenzo. El pontífice protagonizó hasta anécdotas con históricos como el Coco Basile.
El entrenador comentó que cuando llegó al cuervo había un cura en el vestuario que se dedicaba a saludar a los jugadores. Su primer impulso fue echarle dejando una historia muy curiosa.
Esta fue la despedida de la AFA a Jorge Bergoglio: