Centro de datos del Portugal-Dinamarca
"Ha sido la peor exhibición de los dos últimos años". Las palabras de Roberto Martínez al final del partido en Copenhague, que sólo acabó 1-0 gracias a una gran exhibición de Diogo Costa, lo decían casi todo sobre el partido de ida y prometían algo para el de vuelta. Pero la verdad es que Portugal no consiguió mejorar tanto. También Cristiano Ronaldo había dado la cara y pidió apoyo para el equipo, aunque reconoció que ni él ni el equipo justificaban grandes celebraciones desde la grada. Quizá por eso Alvalade estaba tan tranquilo esta noche.
El partido podría incluso haber empezado a un ritmo festivo, de no haber sido por el penalti fallado por el propio Cristiano Ronaldo (6'). Sí, lo paró Kasper Schmeichel, pero su tarea se vio facilitada por el jugador del Al Nassr. Y Ronaldo no suele sentir la presión en estos momentos, a pesar de haber fallado dos de los tres últimos con la selección.
La reacción inmediata fue pedir el apoyo del público, pero la posesión concedida por Dinamarca no hizo sino demostrar que el equipo de Roberto Martínez es, a estas alturas, incapaz de crear situaciones claras de peligro. Aparte del penalti, sólo hubo un centro de Nuno Mendes para el cabezazo de Ronaldo y poco más. Rafael Leão estuvo intrascendente, Francisco Conceição, novedad en el once junto a Bernardo Silva y Gonçalo Inácio, estuvo desaparecido y Bruno Fernandes estuvo lejos del área.
Ofensivamente, Dinamarca no fue muy atrevida y, aparte de un disparo de Hojlund que atajó Diogo Costa, ni siquiera pudo acercarse a igualar su actuación del partido de ida, pero la falta de peligro del conjunto portugués dio cierta tranquilidad al equipo de Brian Riemer, hasta que el 1-0 cayó del cielo. Bruno Fernandes sacó un saque de esquina desde la izquierda y Joachim Andersen (38'), ante la presión de Ronaldo, cabeceó el balón en dirección contraria. Schmeichel fue incapaz de reaccionar y la eliminatoria se igualó.
La suerte escaseó cuando Rafael Leão fue sorprendido en fuera de juego en una jugada que acabó con un gol anulado a Cristiano Ronaldo (45+2), que podría haber adelantado a Portugal justo antes del descanso. A pesar del penalti fallado y del gol anulado, habría sido una ventaja injusta.
Inexplicable incapacidad
Tras el paso por vestuarios, Dinamarca se lanzó al ataque y tuvo el premio del 1-1 en un saque de esquina mal defendido que Kristensen (56') cabeceó casi solo para devolverle la ventaja.
La deslucida reacción de Roberto Martínez desde el banquillo (se limitó a dar entrada a Jota por Rafael Leão) no ayudó a despertar al equipo, pero llegó otro gol cuando menos se esperaba, tras un disparo de Bruno Fernandes al poste y un remate de Cristiano Ronaldo (76') después de que el balón golpease en la espalda de Schmeichel.
Pero ni ese 2-1 sirvió para despertar a los lusos de la torrija. Rúben Dias se quedó dormido, perdió el balón y Dorgu asistió a Eriksen (76') para que éste marcara a puerta vacía. Roberto Martínez dio entonces entrada a Trincão y Nélson Semedo (un clásico), pero parecía que sólo Ronaldo seguía creyendo en la clasificación.
El banquillo de Martínez tenía secretos
El capitán de la selección hizo todo lo posible por enmendar el penalti fallado, pero Schmeichel volvió a dar la campanada con dos intervenciones que parecían decisivas, hasta que Trincão tuvo el valor de ser la figura de esta eliminatoria, llevando el partido a la prórroga, que se jugaría sin Ronaldo, con un disparo de primeras (86') para colocar el 3-2.
El mismo Trincão fue la solución. Jugando en casa, ya en la prórroga, el extremo del Sporting tardó sólo un minuto (91') en poner a Portugal por delante con un remate con clase. Riemer intentó adoptar la misma fórmula dando entrada a Harder, pero en Alvalade sólo había sitio para un héroe de León .
Lanzados los nórdicos al ataque, Gonçalo Ramos (115'), asistido por Diogo Jota, aprovechó el los espacios para sellar la clasificación con el 5-2 final.
Jugador del partido Flashscore: Francisco Trincão (Portugal).