El nombre del argentino había sido vinculado hace ya bastantes días, pero la operación parecía algo estancada. En las últimas horas, sin embargo, todo se ha precipitado (al menos públicalmente). ¿Tendrá relación con los malos resultados del conjunto rojiblanco en el arranque del campeonato? Es una cuestión razonable y cuya respuesta pertenece a la dirección deportiva.
Según informaba Fabrizio Romano a lo largo del día, el acuerdo se iba a sellar a través de un traspaso de 33 millones de euros, pero los clubes han optado finalmente por una cesión -a cambio de un 'kilo' e incluye condiciones para incrementar dicha cifra-. Además, el cuadro rojiblanco tendrá que hacerse con sus servicios (por 32M, lo que pagaron los italianos por él) a final de temporada si se dan una serie de variables no desveladas.
El atacante ha disfrutado de un rol principal con la Vecchia Signora, ya que la pasada temporada participó en un total de 32 encuentros incluyendo el Mundial de Clubes. Ese número podría haber sido bastante más alto de no haberse lesionado a mediados de octubre, un contratiempo que le dejó en el dique seco durante dos meses.
Nico González, otro fichaje de nivel
Sus registros, cinco goles y cuatro asistencias, distan bastante de los que protagonizó en la Fiorentina el curso anterior (participó entonces en 21 dianas y fue el autor de 16 de ellas). Sus buenas actuaciones no pasaron desapercibidas en Turín, aunque su estancia en el gigante italiano no ha sido tan fructífera como se vaticinaba un año atrás.

Como el resto de fichajes del Atlético (Ruggeri, Pubill, Hancko, Baena, Cardoso, Almada y Raspadori), el bueno de González tiene por delante un ambicioso, ilusionante, atractivo y exigente reto por -sobre todo esto último tras lo visto en las tres primeras jornadas-. ¿Volverá a esa versión que tanto maravilló en Florencia? El tiempo dirá...